Compromiso con productos de calidad

He sido ingeniero biomédico durante 40 años y tengo patentes sobre el marcapasos cardíaco de frecuencia variable, la máquina corazón-pulmón y muchos dispositivos médicos que todavía se usan en los hospitales de todo el mundo. A principios de 2006, un amigo, con diabetes tipo 2, llamó para decir que estaba en su "final de ingenio" con el dolor de picarse en la yema de los dedos y me suplicó que lo ayudara. "Simplemente no mido mi glucosa", dijo, "aunque sé las consecuencias. ¡Tiene que haber algo que puedas hacer!”. Me conmovió su angustia, me obligó nuestra amistad y la canción de la sirena irresistible que se encuentra en el corazón de cada desafío de ingeniería. Me lanzaron el guante y prometí que me consumiría durante los siguientes diez años de mi vida, analizando la interconexión entre los capilares sanguíneos y los nervios del dolor, las limitaciones de los dispositivos actuales y las tecnologías existentes que podrían hacer realidad la punción indolora.

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Seguí refinando mis artilugios iniciales y reduciendo costos, hasta que Genteel finalmente se convirtió en el instrumento de precisión que es hoy, con la capacidad de optimizar la extracción de sangre sin ninguna molestia. Esta tecnología dio como resultado 6 patentes estadounidenses y más de 22 patentes internacionales, tanto emitidas como pendientes. Finalmente tuve la confianza para establecer Genteel LLC, ahora una realidad, y mi amigo, que comenzó  todo hace 10 años, no podría haber imaginado que su propio dolor lo llevaría a un producto que cambia la vida y que ahora puede beneficiar a innumerables otros. quienes también han seguido sus pasos.